Señores, señoras, se nos va el año. Ya no queda nada para
que nos deje, o más bien dejar, este extraño 2014. Os aseguro que no lo voy a
echar de menos.
Para rematarlo haciendo lo que más me gusta, aparte de
estar con la “family”, yo sigo con lo mío, hacer kilómetros.
Tras los excesos culinarios de la Nochebuena y la Navidad
el viernes tocó volver a la rutina, nueva subida a la Providencia en 45 minutos y 11 segundos con ritmo medio 4:42, distancia recorrida 9,65 kilómetros.
El sábado con
un buen madrugón salí con la idea de hacer un trote corto y tranquilo y así
fue, 31 minutos y 57 segundos para
recorrer 6,5 kilómetros con ritmo medio 4:55. La verdad es que no
tenía cuerpo para mucho más pero me vino bien para empezar el día con energía.
Pocas cosas hay tan estupendas como salir a trotar tranquilamente de buena
mañana por el Paseo del Muro de Gijón, disfrutando además de un mar bravío
entre brumas… inmejorable.
Hoy domingo
salí también por la mañanita a trotar, fueron 50 minutos y 51 segundos con ritmo
medio 4:37 y distancia recorrida de 11
kilómetros. Tras los primeros cinco kilómetros con ritmos próximos a 4:50,
decidí apretar un poquito más y la verdad es que me encontré muy bien y con la
sensación de ir sin forzar y con ganas de más.
Finalizo la semana con algo más de 50 kilómetros, muy
repartidos y sobre todo muy disfrutados.
Para despedirme os diré que en lo que queda de año, que
no es nada, también PROMETO ENTRENAR y sin duda también os lo
contaré.
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